Estoy leyendo este "Good to Great" (traducido literalmenete sería "De Bueno a Excelente". No he podido ubicarlo en español, pero si sabes algo de eso, me dejas un comentario. El punto es que es tan bueno el libro que lo leo de a poquito. Esta mañana terminé un capítulo y me quedó dando vuelta el siguiente concepto. El autor, Jim Collins dice que una organización (o en el caso mio, un ministerio) que llega a ser excelente no tiene que sólo tener la famosa lista de cosas que hacer sino también una lista que las cosas que no debe hacer. Cuando uno empieza a tener éxito y construye un ministerio fuerte, es impresionante todas las oportunidades y las invitaciones que te llegan. Es tentadora y también una cosa que alimenta nuestra ego, pero es algo que puede impedir que lleguemos de ser buenos a que seamos excelentes. Creo que Dios me llamó al ministerio juvenil. Hay muchas cosas que me interesan, pero tengo que enfocarme en mi llamado y NADA más para poder ser excelente para Dios.
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